Como ya lo he dicho antes, el amor no es para mí (en estos momentos), sin embargo, tengo una pequeña gran luz de esperanza que reside en los confines de mi creación, de mi musicalidad.
Amo a Yann Tiersen, cómo no hacerlo.
Soy una opaca luz brillante, insípida para algunos, misteriosa para otros.
Soy lo que creo ser, no soy una barbie girl (¡gracias al dios del arte!)
Lo importante es la rigurosidad y cumplir los anhelos más profundos.
Hay que ser constante, detallista. Dejar de escuchar la opinión de gente que no entiende tu ámbito. Abandonar el oficio por miradas, comenzar algo nuevo, empezar a hacerlo por uno, no por el qué dirán o el qué pasará si yo…
Rigurosidad, no lo olvides.